Pequeñas Luces, casi Velitas, Pero Luces al Fin El Insular 15 Marzo 09

Pequeñas Luces, casi Velitas, Pero Luces al Fin.

Hemos sostenido reiteradamente que el diálogo es fundamental para avanzar en los diversos problemas que nos van surgiendo día a día como comunidad. Igualmente nos hemos referido a la falta de información en que se nos mantiene a los chilotes sobre los avances del Plan Chiloé. Solo nos informamos por los medios de comunicación cuando se efectúan cerradas reuniones de todo tipo de autoridades con una de dos organizaciones que aparecen como representando el sentir y los anhelos de toda la Isla.
Finalmente hemos podido asistir a una amplia y completa exposición sobre dos temas puntuales que decían relación con Villa Chacao, la puerta de entrada norte a nuestra Isla. Se trataba de explicar a la comunidad del sector norte y nor oriente, las Juntas de Vecinos con sus Directivas, el cumplimiento de las metas que se habían trazado y prometido al sector, en anterior asamblea y recabar más inquietudes y sugerencias a lo que continuaba por ejecutarse, fijando los plazos para ello. Una reunión con la presencia del Seremi de Obras Públicas, con responsables de la Dirección de Obras Portuarias y del MOP y, lo que era de suma importancia, con la presencia del Arquitecto Nelson González Ballesteros, responsable del desarrollo del Plan Chiloé. Igualmente se encontraban presente personal ejecutivo de la Municipalidad de Ancud. Las múltiples intervenciones de los vecinos demostraron adecuadamente que es la comunidad organizada la que tiene muy claro que es lo que se desea y las urgencias de cada situación. Fue relevante, por ejemplo que, junto con saber el cumplimiento del estado de avance prometido para el proyecto Costanera de Chacao y la fijación de los plazos para las etapas finales, los vecinos hicieran presente que, si bien era muy conveniente y de adelanto para Villa Chacao la Costanera a ejecutar, lo que se agradecía, resultaba algo incongruente que aún no se pudiera contar con el Plano Regulador para efectuar las urbanizaciones y, fundamentalmente, las obras de alcantarillado. Se resumió diciendo que era un lindo paseo, siempre que no se supiera la existencia de pozos negros en todas las casas o de evacuaciones de alcantarillado en forma sanitariamente deficiente. Al estar presente personeros de la Municipalidad, por intermedio de uno de sus Responsables, Alex Muñoz, se supo que aún faltaban dos burocráticos trámites para tener Plano Regulador.
Igualmente hubo un largo y fructífero debate al exponerse el cumplimiento de las metas prometidas y las propuestas para las siguientes etapas, de la Ruta Costera que unirá las localidades que bordean la Isla Grande y que, sin duda se trata de una obra de gran envergadura cuya construcción se está ya implementando en su inicio sur.
A la consulta de los vecinos, se informó que el Camino Alternativo Chacao Ancud, por Huicha, se encuentra aún en pañales y que recién empezarán los estudios el próximo semestre. Con toda lógica se hizo saber a las autoridades que se había considerado poco la importancia de esta ruta alternativa, especialmente después que se ha comprobado su necesidad, ante cortes de la Panamericana que han obligado a buses interprovinciales y camiones de alto tonelaje, a su utilización con serios y peligrosos riesgos.
Por haber sido convocados los Vecinos y sus Juntas a comprobar el avance prometido de solo estos dos proyectos, no cabía hacer las peguntas que tanto preocupan por su gran inversión y, aparente, nula prioridad, como es el insólito nuevo aeródromo y el by pass de Ancud. Curiosamente ninguna autoridad, desde el anterior Ministro Bitrán, ni la Jefa de la Dirección de Aeropuertos, ni LOS Intendentes que han ocupado el cargo durante estos últimos años han dado respuesta ajustada a las preguntas que se les han formulado. Todo se hace sin aplicar lo realizado adecuada y oportunamente, con las Juntas de Vecinos del sector Norte y Nor Oriente de la Isla: exponer, explicar, justificar técnica y económicamente una obra de tal envergadura. La inversión de más de veinticuatro o veinticinco mil millones de pesos, amerita una muy clara exposición justificatoria de semejante obra.
Sin duda esa reunión en Villa Chacao, debe ser el inicio de reuniones con dirigentes de auténtica y legal representación comunitaria, como las Juntas de Vecinos, con sus Uniones Comunales, Sindicatos, Organizaciones Gremiales del Transporte, Comercio, Industria. El Plan Chiloé debe ser un documento que conozcan los ciudadanos chilotes. No basta un díptico propagandístico, aunque contenga útiles datos telefónicos. No se necesita más propaganda para el Plan Chiloé, se necesita conocerlo en profundidad. Será la comunidad su utilizador, no los políticos que lo usan para esto y lo otro. Ojalá podamos conocer pronto la que es y lo que significa el Plan Chiloé. Pero conocerlo TODOS.

Finalmente fue una velita al final del túnel…pero que algo ilumina.

Nos hemos estado preocupando de la muy crítica situación que se vive entre los pequeños agricultores productores de leche. La actitud de las empresas lácteas, manejadas casi todas por extranjeros, en donde, por supuesto, no faltan los españoles, de continuar estrujando a sus proveedores llevándoles, en el momento actual, a una irremediable y total pérdida de su fuente de ingresos, lamentablemente había sido seguida por Chilolac, argumentando que, cuando bajan los precios las plantas extranjeras, es por exceso de leche y/o por baja en el precio de la comercialización de los productos. Chilolac, decían, para poder competir no puede comprar a un mayor precio que la competencia su materia prima. Esto, que aparece de una lógica comercial elemental, se contradecía con dos realidades. La primera, la ninguna baja de los precios de los lácteos en los supermercados. Y, la segunda, la falta de leche acusada por varias medianas y pequeñas plantas nacionales, en el continente, y la propia Chilolac.
Con estas presiones argumentativas y escuchando a sus proveedores, Chilolac había dado a entender que, pese a que estaba pagando un precio más alto que Soprole por litro de leche, lo que sin duda alguna demostraba su intención de acrecentar su presencia en el mercado y mantener sus cada día más escurridizos proveedores, estudiaría una mejora en el precio de compra. Finalmente esto se ha materializado mediante circular que informa de un aumentito en el precio (pero aumento al fin) de compra de leche y en su pauta en general. Estos precios ahora son significativamente más alto que Soprole, lo que sumado al cumplimiento que ha dado a sus proveedores y personal la empresa, llevará a que muchos proveedores que dejaron Chilolac en críticos momentos y que significaba una pérdida continuar allí, piensen que la situación es ahora inversa y es su actual comprador el que los está llevando a la crisis con los precios que paga. La verdad que era de prever que esta transnacional que llegó como ávida ave de rapiña a acelerar el cierre de Chilolac, terminaría manejando a su amaño el precio al considerarse comprador único. No contaba con más de cuatrocientos proveedores que, por entregar en tarro, no tenían cabida en la planta extranjera, más dineros frescos y adecuada administración (bastante tacaña, por cierto) y sus esfuerzos, podamos contar con una alternativa confiable, con un verdadero David enfrentando al ambicioso Goliat.
Insistimos. Este aumento en la pauta de pagos, no refleja lo que debe ser un precio mínimo que permita la sustentación de los productores. Baste recordar que el precio pagado en Octubre era un 32.6 %, más bonificación Invernal y Bono Anual, superior al nuevo fijado a contar del 1º de Abril, Más aún ese precio de comparación, era en plena época de máxima producción y que es un precio estacional más bajo. Con estas cifras debe comprenderse la angustiada justificación de los productores lecheros solicitando un precio de sustentación mínima. Nos imaginamos como tanto mayor debe ser la angustia de quienes aún entregan a Soprole recibiendo una cantidad muy inferior de pesos por su leche.
Nuestra confianza en el futuro pasa por la confianza en las personas. Estamos siempre asumiendo la buena fe en el actuar de todos en lo personal, lo político, lo comercial. Por eso no dudamos en creer, aunque nos cueste, que los bajos precios de la leche obedecen a causas externas a la industria misma. El que nos cueste creer se afinca en las comprobaciones día a día que los precios de los lácteos no bajan en supermercados, como tampoco en el local de ventas de Chilolac en la Planta.
Pero seguiremos confiando y esperanzados en que las Autoridades de Gobierno se convencerán de sus propios dichos y “escucharán a la gente” y tendremos explicaciones adecuadas para saber la realidad del Plan Chiloé directamente de sus Autoridades a la Comunidad organizada y representativa.
Seguiremos confiados y esperanzado que las realidades económicas permitan a los productores lecheros evitar su derivación a otros rubros más sustentables y que no los lleve a perder todo lo que actualmente poseen. Tengamos fe que así será